Esta ruta nace de la necesidad de dinamizar los territorios y localidades por los que pasa. Cada uno de los diez municipios en las que se detiene esta ruta están afectados, en mayor o menor medida por el problema más grave al que se enfrenta esta provincia que es la pérdida de población y por ello la iniciativa en conjunto constituye una oportunidad con la que contribuir a través del turismo a generar riqueza económica que será imprescindible para asentar población en estos pueblos. La ruta de los retablos está inmersa en un territorio con grandes posibilidades de desarrollo debido a sus importantes recursos endógenos: naturales, culturales, patrimoniales, gastronómicos, etc.
Esta actividad favorece, sin lugar a dudas, el desarrollo social, cultural y económico de estos pueblos y supondrá un recurso accesible, atractivo, solvente y capaz de estimular el interés y la curiosidad en los potenciales visitantes.
Los retablos, son el eje vertebrador de la ruta, todos ellos responden a la estética del siglo XVI y son sin duda un decálogo de grandes joyas, de la pintura y la imaginería de esta época artísticamente tan fructífera. La ruta se convierte en un viaje intimista, casi místico, siguiendo el recorrido fluvial de los ríos Cea y Esla.
Es una actividad realizada en colaboración con Asociación Cultural Balle de Scapa.
Esta organizada y diseñada en colaboración con El Calabacín Errante.